Fray Tour

En nuestro pueblo, es tradición hacer hogueras para Santa Lucía por las calles y plazoletas. Antiguamente se quemaban muebles viejos, restos de derribos.... Los niños y niñas conocemos este día como "Los tizneros", ya que se queman corchas pequeñas clavadas en un palo y se sale por las calles, persiguiendo a otros niños y niñas, para tiznarlos. Nuestra empresa se puso manos a la obra y planteamos hacer una luminaria en el patio del colegio. El ayuntamiento nos cedió la leña; la AMPA, las corchas y palos para los niños y niñas; las familias, lo s dulces típicos, bombones, refrescos...para todo el que pasara por nuestra hoguera. Además, editamos un tríptico sobre esta bonita tradición y cómo la vivimos los niños/as.  Fuimos por las calles del pueblo, repartiéndolo y animando a visitar nuestra luminaria. Aprovechamos además, para hacer una "porra" y sortear la cesta de productos artesanos que nos habían donado los empresarios de la zona.

Uno de los objetivos de nuestra empresa es darnos a conocer y   buscar apoyo en otras empresas, asociaciones, instituciones de la zona , de modo que obtengamos financiación para nuestras actividades. Al principio,  pusimos un fondo  todos los miembros de "Fray Tour", para poder empezar. Aprovechando la Feria Gastronómica comarcal,  visitamos a los empresarios y productores de la zona para explicar nuestros objetivos y pedir colaboración. Tuvimos muchísima colaboración y preparamos una gran cesta de productos artesanos que, posteriormente, pudimos sortear y que nos ayudó a obtener recursos económicos para nuestra empresa.

Para fomentar nuestras tradiciones y que nunca se pierdan, nuestro cole hace cada año el dulce tradicional para el "Día de los santos": la "Chaquetía" , que acompañamos con nueces, castañas, granada....y comemos en el campo. Nuestra empresa no quiso ser menos y elaboramos nuestra propia chaquetía con ayuda de algunas de nuestras madres. Al día siguiente, fuimos a comerla al campo, visitando nuestra ermita de Consolación, uno de los principales monumentos de nuestro municipio.

Una vez que tenemos claros nuestros objetivos, estamos súper emocionados. Hay que poner un nombre y crear una imagen que nos identifique. En los recreos, nos reunimos a pensar, hablar, discutir.... El laboratorio del colegio se ha convertido en nuestra "sede".                         

Después vino lo más complicado,  ¿a qué dedicaríamos exactamente nuestra empresa? Tras varias asambleas y debates, llegamos a un punto de encuentro: Nuestra empresa se dedicaría a fomentar la cultura, las tradiciones y la naturaleza de nuestro entorno más inmediato.

Cuando nuestros tutores nos plantearon formar parte de este proyecto de Cultura Emprendedora, nos pareció muy chulo y comenzamos a imaginar qué queríamos hacer y cómo nos íbamos a organizar. Después de varias asambleas , viendo las potencialidades de cada uno/a, decidimos que cada uno de nosotros/as escribiría en qué equipo le gustaría estar y , además, en qué equipo veía a otro de sus compañeros/as. Pusimos todo ello en común y nos llevamos la gran sorpresa de que , estábamos  todos de acuerdo con el grupo que nos había tocado, ya que nos identificábamos totalmente con la función de cada uno de ellos.  De pronto, estábamos inmersos en la creación de una nueva empresa, una empresa escolar. A nuestras familias les pareció genial la idea,¡ pondríamos en práctica muchos de los contenidos que trabajaríamos en las distintas materias !